¿Qué pasa si el SAT no encuentra al deudor? La responsabilidad solidaria explicada

¿Qué es la responsabilidad solidaria?

La responsabilidad solidaria es una figura legal del Código Fiscal de la Federación (CFF) que permite al SAT cobrar una deuda fiscal a otra persona diferente al contribuyente original, siempre que se cumplan ciertos requisitos legales muy específicos.

Uno de los casos más delicados es cuando el deudor principal no puede ser localizado en su domicilio fiscal registrado. En este escenario, el SAT puede buscar cobrarle la deuda a los socios, accionistas u otros responsables que hayan tenido participación directa en la empresa.

¿Cuándo aplica esta figura?

Para que el SAT pueda hacer efectiva esta medida, debe cumplir con los siguientes pasos:

• Comprobar que existe un crédito fiscal firme.
• Intentar cobrarle al deudor principal.
• Verificar que el deudor no está localizable en su domicilio fiscal.
• Notificar el requerimiento y la diligencia de embargo mediante el buzón tributario.

Es decir, no basta con que la persona no esté en casa o haya cambiado de dirección. La ley exige que la autoridad fiscal documente cada intento de notificación y agote los pasos del procedimiento de ejecución antes de señalar a un tercero como responsable.

¿Qué pasa si el SAT no notifica correctamente?

Si el SAT no notifica por buzón tributario o no levanta actas justificando la falta de localización del deudor, no puede responsabilizar legalmente a otra persona. Esto viola el principio de legalidad y deja sin efecto cualquier intento de cobro a un tercero.

¿Qué dicen los tribunales?

El Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) ha emitido resoluciones que confirman este criterio. Si la autoridad fiscal no sigue el proceso correctamente, cualquier intento de responsabilizar a terceros queda sin validez legal.

Conclusión

La responsabilidad solidaria por no localizar al deudor no es automática. El SAT está obligado a cumplir con todas las etapas del procedimiento fiscal, incluyendo la notificación por buzón tributario. Si no lo hace, no puede cobrar la deuda a terceros. Esto protege los derechos de los contribuyentes y garantiza un proceso justo.